Fui al medio día a un centro comercial a comprar los últimos regalos de navidad. Es increíble ver a tantas personas comprando tantas cosas. Hay jóvenes que seguramente están comprando detalles a sus amigos o enamorados, gente de oficina haciendo sus últimos gastos a doce meses sin intereses, amas de casa comprando las ultimas promociones de navidad con la tarjeta de crédito del esposo, y así muchas personas que dejan su cotidianidad para salir a comprar los regalos de navidad.
Al regresar a casa después de la oficina, oramos con Ana la novena y me quede tocando villancicos por un momento. Al poco rato de estar tocando la guitarra sucedió algo que aun me sorprende mucho. Dios me invito a componer una canción para el niño Jesús. Digo Dios, porque en realidad yo no soy músico, aunque de alguna manera un poco rústica toco la guitarra. En todo caso después de unos treinta minutos la canción ¨Niño Jesús¨ estaba terminada y lista para pasar la prueba de fuego. Le pedía mi esposita que viniera al cuarto de oración y le cante la canción. Para mi alegría, le gusto mucho. La prueba final será cuando en la novena que voy a hacer en mi casa esta semana la toque en frente de toda mi familia. Espero que por navidad sean misericordiosos y no me tiren tomates. Ya les contare que me sucedió.
Que bueno es vivir la vida con paz y amor, de forma ordenada y sencilla. Dios te permite encontrar en pequeñas cosas grandes milagros. Te invito a que en esta navidad te sorprendas como un niño de la creación de Dios. Solo abre los ojos y se consciente de lo todo y todos los que te rodean.
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